¿De qué manera se puede repensar la comunicación de los museos a partir de las nuevas tecnologías? Se preguntaron desde el Laboratorio de Ablación Láser, Fotofísica e Imágenes 3D (LALFI) perteneciente al Centro de Investigaciones Ópticas, CIOp (CIC-CONICET-UNLP) y la Dirección Provincial de Patrimonio Cultural de la Provincia de Buenos Aires y comenzaron a trabajar en la creación de museos virtuales que propicien la interacción con el público. La facilidad en el acceso y la interacción con las muestras se presenta como la gran novedad del trabajo que busca difundir el patrimonio cultural de la región.
Las experiencias actuales respecto a museos virtuales están relacionadas al desarrollo de sitios webs donde se exponen imágenes de las obras con descripciones breves. En este caso, cada persona contará con la posibilidad de realizar recorridos virtuales desde el momento y el lugar donde se encuentre con un dispositivo móvil, tablet o computadora. A su vez, podrá seleccionar una pieza e interactuar con los detalles a través de opciones como la utilización de tecnología 3D o de realidad aumentada. Para esto el proyecto apunta al desarrollo de sitios webs donde cada institución podrá ejecutar estas tecnologías.
El trabajo se divide en dos líneas: por un lado, la creación de un laboratorio de Tecnologías Multimediales integrado por profesionales de la DPPC-BA, al que el LALFI le transferirá los medios y la capacitación requerida. “Queremos lograr que los museos de la Provincia puedan manejar estas tecnologías, digitalizar parte de sus colecciones y utilizarlas para la documentación y su difusión”, explicó Gabriel Bilmes, Director del proyecto. Por otro lado, trabajar en conjunto en tareas de registro y digitalización en 3D de las obras, desarrollar aplicaciones de realidad aumentada y otras tecnologías inmersivas y utilizar otras técnicas fotónicas para la caracterización y el estudio de las diferentes colecciones. Esto último se implementará a demanda de cada institución.
En la actualidad la Provincia cuenta con alrededor de cuatrocientos museos los cuales son asistidos técnica y profesionalmente desde la DPPC-BA. Florencia Silva integrante de este organismo y participante del Proyecto explica que “Tenemos la tecnología, ahora hay que empezar a pensar en ideas creativas para aplicarlas” y agregó: “Esto viene bárbaro porque además de centralizarlo en nuestra dirección, que haya un laboratorio a disposición y estimular la incorporación de estas tecnologías es bastante novedoso como política de Estado”. El proyecto está enmarcado en la primera Convocatoria del Fondo de Innovación Tecnológica del Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia.
Incorporación de la fotónica: de la pieza original a la pieza en tres dimensiones
El trabajo de digitalización de las piezas en 3D se divide en tres etapas: una inicial que consta en el registro fotográfico del objeto, que involucra entre setenta y ciento veinte tomas fotográficas de cada obra; una segunda etapa vinculada al procesamiento de los registros fotográficos con un software apropiado para generar mallas 3D; y una tercera y última etapa en la que se realizan los ajustes técnicos de resolución, escala y textura de los modelos. El objetivo es que cada museo cuente con un espacio web donde sus piezas más representativas queden listas para su divulgación.
La digitalización de las obras se realiza a través del sistema “Mu3D”, una herramienta simple de operar con la que se obtienen imágenes respetando la textura, color y dimensiones reales del objeto, algo que se logra a través de la utilización de la Fotogrametría Digital. Se trata de un sistema que requiere de poco equipamiento, es de bajo costo y de acceso libre para las instituciones públicas. El mismo fue desarrollado por el LALFI en el año 2017, en el marco de la tesis doctoral de la investigadora Mercedes Morita, integrante del actual equipo de trabajo. En esa oportunidad fueron beneficiadas más de 50 instituciones de la región mediante la transferencia de tecnología y capacitaciones del personal de los museos. Desde entonces las y los profesionales del CIOp y la Dirección mantienen una relación de trabajo y colaboración directa.
“La incorporación de estas tecnologías en los museos implica además un desafío, ya que el efecto que produce compite con el objetivo del trabajo que es la difusión del patrimonio”, destacó la investigadora y concluyó: “Cuando llevamos a cabo estos proyectos lo hacemos desde esta perspectiva, manteniendo un equilibrio. No es usar la tecnología por la tecnología misma, buscamos que sirva para resolver una demanda, que en este caso es la preservación y difusión de bienes culturales.”
Las tecnologías fotónicas combinadas con softwares adecuados y otras tecnologías son soluciones relativamente fáciles de implementar y de bajo costo para resolver una gran variedad de problemas. “Lo que hacemos en nuestro Laboratorio es articularlas para resolver demandas sociales y productivas y generar innovaciones”, explicó Bilmes.
Un museo que “circula”
Con la implementación de estas técnicas cada institución puede hacer más accesible la cultura a los sectores populares logrando que sus colecciones lleguen a más lugares y personas. “Cuando un museo organiza una muestra ¿Cuánta gente puede verla?”, se pregunta Bilmes y remarca la importancia de la digitalización de las muestras y ponerlas en lo que denomina “acceso público”. Un ejemplo de esta experiencia puede visualizarse en el Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Petorutti de la ciudad de La Plata donde se virtualizó la muestra “Krause – Vestigios disponibles” expuesta en una de sus salas, o el recorrido virtual denominado “Museos virtuales”, donde se presentan objetos de diversos museos de la Provincia de Buenos Aires .
“Se puede pensar en un museo que no esté dentro del edificio, un museo que empiece a tomar distintas acciones en el territorio y que tenga mayor accesibilidad”, detalló Silva destacando, a su vez, los buenos resultados de la primera experiencia con el “MUD3D”. “Queremos que la gente que normalmente no va a los museos pueda hacerlo. Para eso tenemos que llevar los museos a la gente. Esa es la idea”, agregó el investigador.
La dimensión cultural del proyecto se entrecruza con el ámbito turístico ya que cada ciudad o pueblo podrá trabajar aspectos como su historia e identidad recuperando y exponiendo las piezas que considere representativas. Esto, además, tiene un impacto productivo. “Esperamos que todas estas dimensiones puedan confluir. Lo original es pensarlo desde una dimensión que tenga que ver con la soberanía, la identidad de un pueblo y su historia. Se estima que el proyecto estará ejecutado en su totalidad a lo largo de 2023.
Por Mariana Hidalgo